x
Colección  Voces que dejan Huellas
Jaime Gil de Biedma

Antología Personal

voz del Autor
De Viva Voz - 26
Visor Libros
2010


x
x

Oír el disco completo   



Jaime Gil de Biedma
El Poeta en su voz -369-
Visor Libros
1998


x

En el castillo de Luna    x    x
Las afueras    x    x
Arte poética    x    x
Dedicado a Vicente Aleixandre
Idilio en el café    x    x
El arquitrabe    x    x
Recuerda    x    x
Vals de aniversario    x    x
Sábado    x    x
Domingo    x    x
Lunes    x    x
En el nombre de hoy    x    x
Albada    x    x
Conversaciones poéticas    x    x
Trompe L´oeil    x    x
Ha venido a esa hora    x    x
Un cuerpo es el mejor amigo del hombre    x    x
Canción de verbena    x    x
Auden´s at last the secret is out...    x    x
Aunque sea un instante    x    x
Noches del mes de junio    x       x Dedicado a Luis Cernuda
Ampliación de estudios    x    x
Mañana de ayer, de hoy    x    x
Días de Pagsanján    x    x
Volver    x    x
Loca    x    x
Happy ending    x    x
Canción de aniversario    x    x
Ruinas del tercer Reich    x    x
Años triunfales    x    x
Pandémica y celeste    x    x
Contra Jaime Gil de Biedma    x    x
No volveré a ser joven    x    x
Resolución    x    x
Príncipe de Aquitania en su torre abolida    x    x
Himno a la juventud    x    x
De vita beata    x    x
De senectute    x    x
Son pláticas de familia    x    x
A una dama muy joven, separada    x    x
El juego de hacer versos    x    x
T´introduire dans mon histoire    x    x
Canción final    x    x


x


La voz de
Jaime Gil de Biedma

9 de diciembre de 1988

Poesía en la Residencia - 3 -
La Residencia de estudiantes
2001
x

Oír el disco completo

Introducción    x
Las afueras, X    x
Noches del mes de junio    x Dedicado a Luis Cernuda
Noche triste de octubre 1959    x
Albada    x
Canción de aniversario    x
Elegía y recuerdo de la canción francesa    x
Contra Jaime Gil de Biedma    x
Un cuerpo es el mejor amigo del hombre    x
Artes de ser maduro    x
T'introduire dans mon histoire    x
A través del espejo    x
Himno a la juventud    x
Wellington Place    x


x

Noches del mes de junio

a Luis Cernuda,

por Jaime Gil de Biedma
Alguna vez recuerdo
ciertas noches de junio de aquel año,
casi borrosas, de mi adolescencia
(era en mil novecientos me parece
cuarenta y nueve)
porque en ese mes
sentía siempre una inquietud, una angustia pequeña
lo mismo que el calor que empezaba,
nada más
que la especial sonoridad del aire
y una disposición vagamente afectiva.
Eran las noches incurables
y la calentura.
Las altas horas de estudiante solo
y el libro intempestivo
junto al balcón abierto de par en par (la calle
recién regada desaparecía
abajo, entre el follaje iluminado)
sin un alma que llevar a la boca.

Cuántas veces me acuerdo
de vosotras, lejanas
noches del mes de junio, cuántas veces
me saltaron las lágrimas, las lágrimas
por ser más que un hombre, cuánto quise
morir
o soñé con venderme al diablo,
que nunca me escuchó.
pero también la vida nos sujeta
porque precisamente
no es como la esperábamos.


x

Arte poética

a Vicente Aleixandre,

por Jaime Gil de Biedma
La nostalgia del sol en los terrados,
en el muro color paloma de cemento
—sin embargo tan vivido— y el frío
repentino que casi sobrecoge.

La dulzura, el calor de los labios a solas
en medio de la calle familiar
igual que un gran salón, donde acudieran
multitudes lejanas como seres queridos.

Y sobre todo el vértigo del tiempo,
el gran boquete abriéndose hacia dentro del alma
mientras arriba sobrenadan promesas
que desmayan, lo mismo que si espumas.

Es sin duda el momento de pensar
que el hecho de estar vivo exige algo,
acaso heroicidades —o basta, simplemente,
alguna humilde cosa común

cuya corteza de materia terrestre
tratar entre los dedos, con un poco de fe?
Palabras, por ejemplo.
Palabras de familia gastadas tibiamente.
  
Bolero para Jaime Gil de Biedma

por José Agustín Goytisolo


x

EL POETA EN SU VOZ:
MODELOS DE EJECUCIÓN Y EJEMPLOS DE EJECUCIÓN


Juan Frau

Vals del aniversario, Albada
Poemas

La estética conversacional del recitado, en efecto, pone en cuestión numerosas convenciones de la métrica. Tomemos, por ejemplo, estos versos de Jaime Gil de Biedma, pertenecientes a “Vals del aniversario” (nuevamente, el recitado se transcribe en cursiva):

posiblemente induce a equivocarnos

en nuestros sentimientos. Pero no
sin alguna reserva, porque por debajo
algo tira más fuerte y es (para decirlo
quizá de un modo menos inexacto) .

   posiblemente induce a equivocarnos en nuestros sentimientos.
Pero no sin alguna reserva,
porque por debajo algo tira más fuerte y es
(para decirlo quizá de un modo menos inexacto)

Aquí, la tirada de endecasílabos deja de ser tal en la percepción de quien escucha la voz, pero además se presenta algún que otro problema teórico: ¿qué ocurre, entonces, con la sílaba que habría que añadir en el cómputo del segundo de los versos, oxítono, cuando éste deja de leerse como tal? No hace falta recordar la convención que rige el cómputo de las sílabas en función de la terminación del verso. Es cierto, en todo caso, que la equivalencia de todas las unidades métricas del texto deja de ser relevante cuando la sintaxis prevalece, pero el problema teórico sigue ahí. La única solución que evita el conflicto entre la teoría y la práctica de la escansión sería la de admitir que nos encontramos ante dos textos diferentes, pero esto no es del todo exacto. En realidad nos encontramos ante dos posibles realizaciones, dos modelos de ejecución (uno de ellos convertido ya en ejemplo de ejecución, el otro imaginado, aún en el ámbito de la abstracción).

El mismo poeta, Gil de Biedma, nos deja otro verso para la reflexión.
Está en “Albada”, y es, en principio, otro endecasílabo:

Entierra la cabeza en las almohadas

   Entierra la cabeza en las almo || ha || das

En este caso, lo que merece comentario es el hecho de que el poeta pronuncia almo- ha-das, con azeuxis, de un modo que contraviene la supuesta lectura correcta del verso, que exige, para tener las sílabas pertinentes y los acentos en su sitio, la zeuxis. Si el ejemplo anterior permitía dos modelos de ejecución, aquí sólo parece haber uno posible; cualquier metrista que, sobre el papel, procediera a la escansión del verso señalaría inequívoca y necesariamente la sinéresis.
Habría que admitir, así pues, que los ejemplos de ejecución no se limitan a actualizar las posibilidades que ofrecen los modelos de ejecución, o bien, y esto es algo ciertamente conflictivo, que habría modelos de ejecución que no se corresponden con las exigencias del verso, sino que se enfrentan a ellas.

x
x
textos de sus poemas
x